Muchas mamás y papás tienen miedo de que su bebé se quede con hambre o, al contrario, de que esté comiendo demasiado. Por ello, una de las principales preocupaciones de los padres, sobre todo de los primerizos, es cuántas tomas de leche dar a un recién nacido y qué cantidad de alimento debe tomar en cada una de las tomas.
En este artículo te contamos cada cuánto toma leche un recién nacido y cuántas tomas debemos darle para satisfacer sus necesidades nutricionales.
Cada cuánto toma leche un recién nacido
En un recién nacido, el número de tomas suele variar entre 8 y 14 al día, durando cada toma unos 10-20 minutos, pero el niño deberá comer todas las veces que quiera y el tiempo que quiera.[1] y [ 2] Por tanto, suele mamar, de media, cada 2 horas. Este número de horas suele ser más bajo en los primeros días y va aumentando a medida que el pequeño crece. Al desarrollar su sistema digestivo, puede albergar más comida, por lo que tiende a consumir más cantidad de leche en cada toma, reduciendo progresivamente el número de tomas diarias.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que cada bebé es diferente. Esto quiere decir que la respuesta a cada cuánto toma leche un recién nacido varía en cada bebé según sus propias necesidades del momento.
¿Todos los bebés deben tomar la misma leche?
Cada lactante tiene sus propias necesidades de leche, ya que su ritmo de crecimiento y desarrollo es totalmente individual. Por tanto, todos los bebés no toman la misma cantidad de leche, ni tampoco a la misma velocidad. De esta manera, no debemos comparar a nuestro pequeño con otros bebés, ni tampoco obligarle a tomar más o menos leche de la que quiere.
Cuántas tomas darle a un bebé recién nacido
Teniendo en cuenta el apartado anterior, no existe un número de tomas de leche fijo ni ideal. Cuántas tomas de leche dar a un recién nacido depende de cada pequeño, de su ritmo de crecimiento y de sus necesidades en cada momento del desarrollo. Por este motivo, la Asociación Española de Pediatría (AEP) recomienda alimentar al bebé a demanda, es decir, darle de mamar cada vez que quiera, sin un horario rígido y sin un número de tomas establecido. El bebé debe decidir el momento de cada toma de leche y cuánto tiempo dura cada toma. Así, se aconseja que mame todas las veces que necesite durante el tiempo que quiera.[1]
No obstante, ¿cómo sabemos que quiere comer? Desde los primeros días, es muy importante ofrecerle leche cada poco tiempo y observar su comportamiento. Para ello, colocaremos su cabeza cerca del pecho y comprobaremos si busca el pezón, abre la boca o muestra el reflejo de succionar. Así, cada vez que quiera alimentarse podrá hacerlo y la mamá conocerá mejor las necesidades de su pequeño.
Qué afecta a la hora de la cantidad de tomas
Dado que la cantidad de tomas depende de cada bebé, el principal factor que afecta al número de tomas es su apetito. Algunos bebés hacen menos tomas y toman más leche en cada una de ellas, mientras que otros toman menos leche pero comen con más frecuencia. Además, suele haber periodos del desarrollo en los que tienen más apetito que en otros, algo que también depende de cada bebé.[2]
En el caso de que tu bebé no esté siendo alimentado con leche materna, te recomendamos que acudas a tu pediatra para que te pueda ayudar.
Cómo saber si el bebé toma suficiente leche
Hay que respetar si el bebé no quiere tomar más leche en una toma, es decir, si se suelta y aunque se lo facilitemos no quiere seguir succionando, conviene no forzarlo. No obstante, ¿cómo podemos saber si está tomando suficiente leche en realidad? Para saber si se está alimentando bien, es aconsejable que el pediatra controle su ritmo de crecimiento y valore si está comiendo lo suficiente o no, o si, por el contrario, está comiendo demasiado. Por ello, si tienes cualquier duda sobre la alimentación de tu pequeño, te recomendamos que acudas al pediatra y sigas sus consejos.
Además, existen una serie de señales que pueden ayudarnos a saber si nuestro pequeño tiene hambre, como el reflejo de búsqueda del pecho, que abra la boca y/o saque la lengua, que intente succionar, que se muestre inquieto o que llore. Es muy importante aprender a identificar estas señales para satisfacer adecuadamente sus necesidades. Además, se recomienda no esperar a que llore para amamantarle, ya que la calidad de las tomas puede verse afectada.
Si quieres conocer más a fondo las señales que envía un bebé lactante cuando quiere comer, te recomendamos este otro artículo sobre Cómo saber si mi bebé tiene hambre.
Aviso importante: la lactancia materna proporciona la mejor nutrición a los bebés. El pediatra es el que mejor te puede asesorar sobe el cuidado y la alimentación de tu hijo.
Fuentes:
- A.E.P. (2013). Guía Práctica para padres. Asociación Española de Pediatría. Disponible en aeped.es.
- Asociación Española de Matronas. (2008). Los consejos de tu matrona.