Muchas mamás y muchos papás se encuentran en una situación en la que su bebé no para de llorar y no saben exactamente cómo calmarlo. Después de intentarlo todo, el pequeño sigue con el llanto. En estos casos, los padres y las madres no suelen saber cuál es el motivo de ese llanto tan agudo y solo quieren que el bebé se tranquilice y deje de llorar. ¿Ha sido alguna vez tu caso?
Saber cómo calmar al bebé cuando llora no siempre es sencillo. Por este motivo, a continuación, te vamos a explicar algunos trucos que te ayudarán a entender qué hacer para que el bebé deje de llorar.
Qué hacer para calmar al bebé cuando llora
Lo primero que debes hacer es intentar comprender el motivo por el que está llorando tu bebé y actuar en consecuencia. Ten en cuenta que el llanto es la única forma que tiene tu bebé de decirte que algo no va bien, es precisamente por esto por lo que su llanto es, a veces, inevitable. No perder la paciencia es fundamental en estos casos, ya que es la única manera que tendrás para entender qué está tratando de decirte.
Escucha el llanto del bebé para entenderlo
Entender el llanto del bebé puede ser un gran desafío, especialmente en tus primeros días como mamá. Por ello, el consejo más importante que vamos a darte es que no te pongas nerviosa y tengas paciencia, solo así llegarás a comprender qué es lo que le pasa a tu bebé. Además, ten en cuenta que el estado de nerviosismo se lo transmitirías al bebé.
¿Cómo puedes distinguir un tipo de llanto de otro? Vamos a enseñarte algunas interpretaciones posibles del llanto del bebé:
- Llanto muy persistente: es probable que tu bebé te esté pidiendo comer y se calmará solo cuando se encuentre plenamente satisfecho. Es fundamental que no dejes al bebé llorar por hambre, sino que siempre te adelantes a las tomas. ¿Cómo hacerlo? Observando a tu pequeño. Con el paso de los días sabrás identificar cuándo empieza a tener ganas de comer.
- Llanto muy agudo: si el llanto del bebé es muy agudo suele significar que tiene algún tipo de dolor.
- Llanto pequeño pero molesto: es probable que quiera que le cambies el pañal sucio por uno limpio.
- Llanto agudo e intenso: este llanto suele ser bastante común y puede significar que el bebé tiene cólicos.
- Llanto desconsolado: o bien tendrá calor o bien tendrá frío. Para comprobarlo tendrás que pasarle a tu bebé la mano por la nuca. Si está sudando es que tiene calor; si por el contrario tiene la nariz y las manos frías, tu bebé necesita más prendas de abrigo.
- Llanto muy nervioso: el bebé está cansado y quiere dormir o bien se siente irritado porque no consigue algo que quiere.
- Llanto con hipos: el llanto con hipos es muy identificativo desde que son bebés hasta que crecen. Si tu bebé lo realiza muy a menudo significa que está enfadado
Métodos para hacer que el bebé deje de llorar
Hacer que tu bebé deje de llorar es, seguramente, tu mayor preocupación en estos momentos, especialmente cuando ya lleva mucho rato y no se calma con nada. ¿Qué hacer en estos casos? Vamos a ver algunos de los métodos que te pueden ayudar a conseguir que tu bebé deje de llorar:
- Intenta hacerle eructar para que se libere de los gases. En muchas ocasiones, los bebés están muy incómodos por los gases atrapados, por ello, al liberarlos se acabará el llanto.
- Prepara un baño caliente. Esto también suele ser una buena opción si, por ejemplo, el bebé no consigue dormirse. El baño le relajará y le ayudará a conciliar el sueño.
- Si el bebé tiene menos de tres meses, es posible que el llanto sea por un cólico. Masajea la barriguita y mueve sus piernas dos o tres veces al día para que desaparezcan.
- Si tiene hambre, dale de comer y no esperes el tiempo hasta la siguiente toma programada. La alimentación a demanda es lo más recomendable para el bebé.
- Si aun así su llanto persiste, es posible que tenga algún tipo de dolor.
Qué hacer si mi bebé no para de llorar
A veces puede llegar a ser frustrante el no entender por qué el bebé no para de llorar. No obstante, lo fundamental será siempre no perder la calma y la paciencia. Si los dos perdéis la entereza, el bebé lo notará, se pondrá aún más nervioso y el llanto será mucho más persistente. Piensa que todo tiene solución.
Si después de todo sigues sin saber qué es lo que le pasa al bebé, te recomendamos acudir al pediatra. Él te ayudará con el pequeño para que todo vuelva a la normalidad.
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Advertencia importante: la lactancia materna proporciona la mejor nutrición a los bebés. El pediatra es el que mejor te puede asesorar sobe el cuidado y la alimentación de tu hijo, y sobre los alimentos que debes añadir a la dieta conforme va creciendo.
