La lactancia materna es el mejor alimento para tu bebé, pero cuando esta no es posible la fórmula infantil es un sustituto adecuado. Sabemos que ofrecer una buena alimentación a nuestro bebé es imprescindible para que crezca de forma sana y, para ello, es necesario que escojamos la leche de fórmula adecuada para el pequeño como parte de una dieta diversificada. Pero además de elegir la leche de continuación apropiada, también será importante que aprendamos a prepararla de manera correcta para garantizar la buena nutrición y seguridad del bebé.
Por eso en el siguiente artículo te enseñaremos, paso a paso, cómo preparar Enfamil adecuadamente. ¡Sigue leyendo y descúbrelo!
Preparar Enfamil paso a paso y de forma segura
Antes de preparar Enfamil, será importante que tomemos una serie de precauciones para proteger la salud del pequeño, el cual tiene todavía en desarrollo su sistema inmunitario y, por tanto, resulta esencial mantener la higiene al máximo, por eso:
- Lava y esteriliza el biberón, las tetinas y el resto de utensilios que vayas a utilizar para la preparación de la leche. Para ello, ponlos a hervir en una olla con agua durante 1 minuto.
- Lava bien tanto tus manos como el área de la cocina que utilizas para la preparación la leche de fórmula, ya que así mantendrás al máximo la higiene.
Una vez hayas tenido en cuenta estas precauciones, a continuación te explicaremos cómo preparar Enfamil con un sencillo paso a paso:
1. Coge una olla o cacerola y calienta agua hasta que hierva. Una vez el agua esté hervida, deja que se enfríe hasta que esté a temperatura ambiente.
2. Cuando el agua se haya enfriado, tendrás que verter la cantidad correcta en el biberón que anteriormente has limpiado y esterilizado. Ahora tendrás que añadir en el mismo biberón la cantidad correcta de cacitos rasos con polvo y luego guardar el cacito seco dentro del envase del producto.
Para preparar Enfamil de forma correcta deberás consultar la tabla de debajo donde se indica tanto el número de cacitos como el agua necesaria según la edad del bebé. Esta tabla corresponde a la preparación de Enfamil Premium COMPLETE 2:
3. Cuando hayas añadido tanto el agua como los cacitos indicados en la tabla de alimentación, tapa el biberón y luego tendrás que moverlo entre las manos y agitarlo hasta que el polvo de disuelva completamente en el agua.
4. Por último, comprueba la temperatura de la leche en la parte interior de tu muñeca para asegurarte de que no esté demasiado caliente para el bebé.
Cómo conservar Enfamil una vez preparada
Después de seguir nuestro paso a paso de cómo preparar Enfamil, es importante que también sepas cómo debes conservar la leche del bebé una vez preparada. Para ello, tendrás que seguir las siguientes recomendaciones:
- La leche en fórmula ya preparada puede estropearse rápidamente. Por tanto, tendrás que darle el biberón al pequeño inmediatamente.
- En el caso de que no lo alimentes en seguida, almacena el biberón tapado en el frigorífico a una temperatura que se encuentre entre 2 y 4ºC. No deberás congelar el producto, por lo que sólo podrás almacenarlo en la nevera durante 24 horas como máximo.
- No le des a tu bebé la fórmula preparada si este producto ha estado fuera de la nevera más de 2 horas. También es importante que si has comenzado a darle el biberón al niño, lo consuma en menos de 1 hora sin refrigerarlo durante ese tiempo.
- Tira siempre la leche en fórmula que haya sobrado y recuerda limpiar posteriormente tanto el biberón como el resto de utensilios que hayas utilizado.
Medidas de seguridad al momento de preparar el biberón
Además de las anteriores recomendaciones, también será esencial que tengas en cuenta las siguientes medidas de seguridad en el momento de preparar Enfamil:
- Almacena siempre el envase de Enfamil en un lugar seco y fresco. Además, una vez hayas abierto el producto tendrás que utilizarlo dentro del mes siguiente.
- Antes de usar Enfamil, recuerda consultar la fecha de caducidad.
- No añadas otros ingredientes como azúcar o cereales a la leche de fórmula.
- Nunca calientes la fórmula preparada en el microondas, ya que podría calentarse de manera desigual y quemar la boca del bebé.
- Nunca congeles la leche preparada, ya que algunos componentes del producto podrían descomponerse.
- Consulta siempre con un profesional de la salud y lee detalladamente la información que aparece en el envase.
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