La analgesia epidural es el método para el alivio del dolor más estudiado y difundido (1) que se aplica en la columna vertebral, en concreto en el espacio epidural. Consiste en el bloqueo nervioso central mediante la inyección de un anestésico local cerca de los nervios que transmiten dolor, en la región lumbar, para el alivio del dolor durante el trabajo de parto y el momento del alumbramiento (1). Las ventajas de la anestesia epidural son notables, ya que es la única que ofrece una buena analgesia en todas las fases del parto haciendo desaparecer el dolor, pero permitiendo a la mujer estar consciente en todo momento de lo que ocurre durante su parto (2).
No obstante, no todo son ventajas, como con cualquier otro fármaco hay ciertos incovenientes. A continuación, te explicamos todo lo que debes saber sobre cómo funciona la anestesia epidural.
¿Cuándo es necesaria la epidural?
En principio, el parto es un proceso fisiológico que, como tal, no debería requerir de ningún tipo de anestesia. Pero también es cierto que son muchas las circunstancias que llevan a que un buen número de mujeres de parto sientan dolor en distintos grados. Es en ese momento en el que los profesionales sanitarios pueden ofrecerle la anestesia epidural si se cumplen algunos requisitos tanto médicos como legales. Así, la mujer tiene que haber pasado las pruebas de anestesia realizadas durante el embarazo, ya que la epidural está contraindicada en algunos casos, la anestesia no se aplicará hasta que la mujer haya sido examinada por la matrona, el obstetra y el anestesiólogo y constaten que a priori no existe ninguna contraindicación para su aplicación y, además, la mujer firmarel consentimiento informado para que le suministren este tipo de anestesia. (2)Además, tiene que encontrarse en trabajo de parto activo, con unos 3-4 cm de dilatación del cuello del útero, pero no muy avanzado. Aproximadamente a partir de los 8 cm de dilatación ya no se pone la epidural porque tarda un tiempo en hacer efecto, con lo que el bebé podría nacer antes (3).
¿Hay riesgos en la epidural?
En cualquier procedimiento médico o en la toma de medicación siempre hay riesgos y es tarea del facultativo valorar si, en cada caso, estos superan o no a las ventajas. Si eres candidata a que te suministren este tipo de anestesia, en el consentimiento informado podrás leer en detalle los riesgos que puede haber. Es tu decisión, en virtud de la Ley de Autonomía del Paciente, decidir si quieres que te la administren o no.
¿Duele que te pongan la epidural?
No podemos decir que poner la anestesia epidural sea un procedimiento muy doloroso, pero sí resulta molesto. Porque, ¿cómo alivia el dolor la epidural? La inyección se administra en la columna vertebral, entre dos vértebras de la parte baja de la espalda, y el anestésico bloquea los nervios que llevan la sensación de dolor desde esa zona hasta el cerebro (3). Se deja un catéter colocado por donde el anestesista va administrando la anestesia según lo crea necesario (4). Además del pinchazo, es posible que estés sintiendo dolor y que te cueste mantenerte completamente quieta en la postura indicada, pues tienes que quedarte sentada o tumbada de lado y con la espalda arqueada para que te puedan pinchar.
¿Tiene efectos secundarios?
En la analgesia epidural pueden presentarse complicaciones. Afortunadamente, las complicaciones más graves son también las menos frecuentes (1).
Podrían ser:
- Hipotensión arterial (descenso de la tensión arterial).
- Bradicardia (disminución de la frecuencia cardiaca).
- Dolores de cabeza persistentes después del parto (es relativamente poco frecuente) (1-10% de los casos).
- Dolor en la espalda (zona de la punción): se pueden sentir molestias transitorias en la zona de punción durante el parto o después (10-22% de los casos)
- Fiebre alta (aumento de la temperatura corporal): se produce en un 15% de los casos. Cede tras retirar la epidural y no es grave ni se debe a ninguna causa infecciosa.
- Fallo de la técnica: aproximadamente un 10% de las mujeres a las que se les administra analgesia epidural, pueden seguir percibiendo la misma sensación dolorosa previa.
- A veces la epidural calma el dolor sólo en algunas zonas. En estos casos hay que volver a recolocar el catéter, o bien abandonar la técnica.
- Se puede perder un poco de sensibilidad en las piernas por lo que puede restringir la elección de otras posturas en el parto y retrasar la capacidad de ponerse de pie después del parto.
- Puede que no alivie de forma uniforme, afectando a un lado del cuerpo más que a otro.
- Puede causar picor.
- También puede provocar náuseas, aunque algunas mujeres sienten náuseas y vomitan durante el parto aún sin medicación para el dolor.
- Puede haber una disminución de sensación de necesidad de orinar (a veces es necesario colocar una sonda para vaciar la vejiga y ayudar a que el bebé pueda descender más fácilmente).
- Temblores: son frecuentes e incómodos; pero se alivian con mantas, calor y masajes.
- Convulsiones: 1 / 9.000 procedimientos.
La epidural puede aumentar levemente el riesgo de tener un parto instrumentado (ventosa, forceps), sin embargo, no está demostrado el aumento de cesáreas.
Complicaciones más raras y poco frecuentes
- Puede causar infección local y/o reacción meníngea.
- Hipotensión intracraneal.
- Lesiones neurológicas.
Todo lo anterior suele ser prevenido o tratado de forma satisfactoria, ya que el anestesiólogo valora cuidadosamente el estado de salud previo y tomará las máximas precauciones médicas para evitarlas.
¿Cuánto dura el efecto de la anestesia epidural?
La anestesia epidural comienza a hacer efecto a los 10-20 minutos de haberse administrado y el efecto se mantiene mientras se siga administrando a través del catéter que se ha dejado en la espalda (3). Así mismo, la dosis puede subirse o disminuirse en función de la evolución del parto.
La duración de los efectos de la analgesia epidural se alarga tanto tiempo como se necesite. Una vez finalizado el parto se retira el catéter epidural que ha estado fijado en la espalda y las sensaciones normales reaparecen al cabo de unas pocas horas. (1)
¿Tiene consecuencias para el bebé?
Hasta ahora hemos hablado del funcionamiento, los efectos y las consecuencias de la epidural para la madre. Pero ¿cómo le afecta la epidural al bebé en el útero?
La dosis de analgesia que llega al niño a través de la sangre es muy pequeña, por lo que la repercusión sobre el bebé es mínima, aunque pudiera disminuir el reflejo de succión del recién nacido a corto plazo. (1) Por otra parte, la epidural puede influir al principio de la lactancia al provocar un edema en las mamas por los fluidos intravenosos que se le inyectan a la madre para intentar contrarrestar los efectos de la anestesia (5).
Poner la epidural implica pasar de un parto fisiológico a uno medicalizado y esto supone que el bebé tiene que monitorizarse en todo momento. Su frecuencia cardiaca puede disminuir, ya que también desciende la presión arterial materna (4).
Fuentes
(1) Analgesia epidural en el parto y otras medidas de apoyo. Hospital Universitario de Ceuta. Dirección Territorial de Ceuta, Instituto Nacional de Gestión Sanitaria. Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Gobierno de España. Disponible en: https://ingesa.sanidad.gob.es/bibliotecaPublicaciones/publicaciones/internet/docs/Analgesia_epidural.pdf
(2) Los consejos de tu matrona. Asociación Española de Matronas. Disponible en: https://aesmatronas.com/wp-content/uploads/2018/01/Los-consejos-de-tu-matrona.pdf
(3) Anestesia raquídea y epidural, Medline Plus. Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/007413.htm
(4) Bloqueo epidural - Embarazo, Medline Plus. Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/ency/patientinstructions/000484.htm
(5) La epidural, El Parto es Nuestro. Disponible en: https://www.elpartoesnuestro.es/informacion/parto/la-epidural